Comienza el curso escolar con la polémica sobre la Calle Mayor sin resolver. Una parte de la opinión pública en contra de la medida que tomara el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Moratalla a inicios de agosto y otra más o menos satisfecha porque finalmente y tras las reuniones mantenidas (la última en la tarde del 6 de septiembre), se podrá circular libremente por la calle mayor y se podrá aparcar seas o no residente en ella.
Según la alcaldesa Candi Marín, la decisión inicial se ha visto modificada a petición de los vecinos, pero “llegado a un punto hay que respetar la ley”. Por este motivo y a día de hoy, hay menos aparcamientos en la Calle Mayor, “porque hay zonas tan estrechas que no cabe la acera para el peatón, el aparcamiento y la posibilidad de que pase otro coche”.
D.G.: Alcaldesa, para contextualizar, ¿por qué se toma la medida de controlar la circulación y aparcamiento en la Calle Mayor?
C.M.: Esa iniciativa se toma por dos cuestiones. Una, para mí la más importante, yo como concejala de Salud Pública y Tráfico, es que hay muchas zonas de la calle en las que los peatones no tienen aceras, no hay lugar donde apartarse cuando viene un vehículo; y por otro lado también nos preocupaba que un vehículo de emergencias tuviera que acceder a algunas zonas de la calle y no pudiera. La segunda cuestión es que…nosotros queremos que la Calle Mayor pueda ser visitable, que ahora mismo pues es bastante difícil el poderla visitar turistas, gente que quiera hacer fotografías…el impedimento de los coches siempre está ahí…aunque eso es en segundo plano. Yo me centro en que los coches que estaban aparcados impedían en muchísimos casos la entra y salida de la gente a sus propias casas, por otro lado no hay ningún espacio específico para peatones y cuando no lo hay la calle es preferentemente peatonal aunque se permita la circulación pero nunca los coches pueden ocupar el espacio reservado para los peatones. Eso lo dice la ley, no es opinión mía. En ese sentido se han reducido un número de aparcamientos. Por un lado otros aparcamientos en la zona de la Glorieta se han cambiado la orientación de aparcamiento de los vehículos para que el morro no se meta en la acera. Se han dejado huecos libres para que vehículos de emergencias puedan acceder o que pueda incluso maniobrar y darse la vuelta.
D.G.: Pero estas medidas han hecho que parte de los comerciantes y un buen número de residentes no estén de acuerdo. ¿Se ha tenido en cuenta que se les podía perjudicar?
C.M.: Nosotros entendíamos que efectivamente al reducir el número de aparcamientos para facilitarle a los peatones el paso, para la seguridad de los peatones, para facilitar vehículos de emergencias o vehículos de carga y descarga , eso se tenía que hacer, reducir el número de aparcamientos se tenía que hacer sí o sí, por seguridad y por derecho de los peatones. Pues como se tenía que hacer esa medida y se iban a ver perjudicados los residentes y los comercios bajo su punto de vista, las medidas que nosotros tomamos son: que buena parte de esos aparcamientos sean para residentes y otro número de aparcamientos de color amarillo que serían de carga y descarga, pero no de carga y descarga para proveedores de los comercios, sino para cualquier ciudadano o ciudadana que quiera ir a la Calle Mayor a comprar. En esos aparcamientos amarillos se les permitía estar un máximo de 30 minutos. Otra medida más que se tomaba era una plaza en el aparcamiento municipal, para que los propios comerciantes pudieran aparcar sus propios coches…esa es otra de las medidas que nosotros propusimos… ¿qué pasa? que bien por falta de información quizá por nosotros mismos que no lo hemos hechos con la información previa con la que debíamos haberlo hecho…la gente no lo ha entendido o no le gusta la medida y después de varias reuniones se ha optado por quitar las plazas de residentes, las plazas de carga y descarga y todos los aparcamientos tal cual están ahora van a ser libres, para cualquier persona que suba a la Calle Mayor.
D.G.: Esta última es la medida que se tomó en la última reunión del martes 6 de septiembre, pero, los asistentes a la reunión ¿estaban de acuerdo?
C.M.: Vamos a ver…ellos insisten en que desde el Casino hacia arriba se pueden poner aparcamientos donde no viva gente, pero nosotros técnicamente hablando con la ley en la mano, es imposible poner más aparcamientos de los que ya hay, por lo que te he comentado, al no existir aceras la ley te obliga a dejar un espacio libre para los peatones.
Pero insisto en una cosa, nosotros hemos mantenido tal cual estaba desde el ancho de la farmacia hasta la Glorieta, el único aparcamiento que se ha quitado es uno debajo de un poyo cerca de la Plaza de la Iglesia, es el único aparcamiento que hemos quitado esta legislatura. ¿Por qué? Porque en algunas circunstancias se da coche que va coche que vuelve y se puede producir en una emergencia y es el único espacio en el que pueden cruzarse dos coches.
D.G.: ¿Y en la parada de los taxi?
C.M.: Vamos a dejar un espacio para un vehículo de emergencias, un camión, que tenga que aparcar ahí. Lo demás se va a quedar tal cual estaba.
Las prohibiciones de los aparcamientos que hay desde “el ancho “de la farmacia hasta la Plaza de la Iglesia son del Partido Popular no es nuestra. Excepto el poyo que te he dicho.
D.G.: Alcaldesa siempre has dicho que no eras partidaria de las multas, sin embargo ahora sí que está habiendo muchas y por este motivo.
C.M.: Ocho, ocho multas en todo este período, lo que pasa que es muy fácil decir cosas que no son. Ha habido un período de adaptación, la totalidad de las ocho multas han sido después de avisos reiterados y han sido por estacionamientos, no por paradas. Han estacionado el coche, se les ha informado de que el aparcamiento era prohibido y han persistido. Yo soy partidaria de hacer insumisión, pero este no es el caso no hay motivos porque hay perjuicio personal ni está en peligro la vida de nadie ni la salud. Estamos hablando de que la insumisión en esto es que no quieren andar unos cuantos metros más de donde dejan su coche. Es que no tiene más vuelta de hoja, que quieren el coche más cerca de su domicilio.
D.G.: ¿Es esta medida la antesala de la zona azul?
C.M.: No es cierto, no es cierto. Nuestra intención era que la Calle Mayor fuera un lugar para visitar, un espacio cómodo que los bares pudieran sacar sus mesas a la calle no solamente los fines de semana ni en verano.