Con motivo de la conmemoración del Día Internacional del Libro, el Ayuntamiento de Moratalla ha promovido actividades variadas con el que celebrar este señalado día vinculado a la literatura y al arte de las letras. Para ello, en la jornada del sábado va a haber diferentes talleres, lecturas y espectáculos para diferentes públicos.
Por un lado, en la Glorieta se realizarán diferentes actos destinados a todos los públicos, y en especial a los más pequeños, con un taller de iniciación al pintado en miniatura que comenzará a partir de las 10:30 horas. Seguidamente, a las 11:30 horas está prevista la ‘Batalla de los Cuentos’, que constará de una lectura continuada de cuentos o relatos cortos que amenizarán la mañana.
Ya por la tarde, se llevará a cabo en el Teatro Trieta el testimonio psicoteatral de crecimiento personal ‘¿Quién quiere juzgar conmigo?’, con la intervención del coach Diego Jiménez. Las entradas se encuentran a la venta en la oficina de Turismo de Moratalla, y este acto que comenzará a las 20:30 horas está dirigido a un público preferentemente adulto.
El formador y coach en comunicación y HH.SS., Diego Jiménez, estrena su proyecto más personal bajo la dirección escénica de Fernando Ripoll. “¿Quién quiere ju(z)gar conmigo?” es una propuesta valiente y original que surge de la necesidad interna del autor, como coach y ser humano, de querer comunicar, desde la emoción y en primera persona, la teoría y la “práctica” de todo lo aprendido después de desaprender primero.Desde un formato unipersonal, más cercano a al psicoteatro o al teatro “reallity”que, a cualquier disciplina, Diego Jiménez,comparte sus vivencias más íntimas y las pautas que le han ayudado en su proceso de crecimiento personal. Entregando al público los recursos y conocimientos para romper con las cargas innecesarias que nos imponemos, de manera consciente e inconscientemente.
El guionista y autor de la idea original, que se representa a sí mismo con crudeza sanadora en una exposición terapéutica, transita con naturalidad desde la reflexión a la emoción o la carcajada. Haciendo de lo particular la generalidad y consiguiendo que el espectador se vea reflejado y se identifique.A través de un ejercicio de comunicación arriesgado y generoso de terapia abierta al público, el protagonista nos conduce por sus experiencias y emociones, haciéndonos comprender las nuestras.Se aprende, pero no es una conferencia motivacional más, se representa, pero no es una obra de teatro al uso, sólo hay un protagonista, pero no es un monólogo, te ayuda, pero no es una terapia… …Es todo junto.